6/10/2023

Notas de investigación

Modularidad topológica en el Consejo Constitucional

En esta Nota de Investigación exploramos la modularidad de red del Consejo Constitucional. La modularidad de red es un procedimiento algorítmico que permite identificar la formación de comunidades caracterizadas por algún grado de diferencia (divergencia, discrepancia, distancia) con otras comunidades o módulos al interior de la red general. Este procedimiento lo hemos aplicado a las votaciones en el Consejo entre el 15 de septiembre y el 4 de octubre de 2023. Los resultados del ejercicio muestran que, a pesar de la existencia de dos grandes comunidades políticas distintas, una mayoritaria (derecha) y otra minoritaria (izquierda), en distintos casos emerge algún nivel de reconocimiento de las pretensiones de validez de la posición contraria. Este parece asociado a la deliberación política general de las normas a distintos niveles (consejeros, expertos, asesores, partidos y discusión pública). De este modo, a mayor deliberación previa de las normas se incrementan los potenciales de reconocimiento de la posición contraria y de acuerdo.

Autores
  • Aldo Mascareño

    Investigador C22

  • Juan Rozas

    Investigador Asistente C22

  • Benjamín Lang

    Investigador Asistente C22

  • Pablo A. Henríquez

    Investigador C22

Modularidad topológica en el Consejo Constitucional

1. El problema

En una Nota de Investigación previa –‘La topología del Consejo Constitucional en el plenario’ (Mascareño, Rozas y Lang 2023)– hemos realizado un ejercicio metodológico para determinar las arquitecturas topológicas de las redes de votación en el pleno del Consejo Constitucional entre el 15 de septiembre 2023 y el 25 de septiembre del mismo año (516 votaciones). Con el periodo de votación de enmiendas ya concluido el día 4 de octubre de 2023, reiteramos ese ejercicio ahora con todas las votaciones del plenario (971 votaciones).

Tanto entonces como ahora, el objeto es explorar las configuraciones de red donde la probabilidad de lograr acuerdos que apunten al incremento de transversalidad del texto constitucional sea mayor. Agregamos ahora un análisis de modularidad de red. Esta consiste en la identificación de un puntaje que permite determinar la formación de comunidades en la red general de acuerdo con la forma en la que votan. Subyace también a este ejercicio, el argumento de que los acuerdos son posibles aun si la configuración general de las votaciones observada por medio del algoritmo nominate indica que hay dos grupos separados (derecha e izquierda) sin un centro que los articule. En principio, a una distribución tal se le podría denominar altamente polarizada. Sin embargo, esta fue la configuración de votaciones de la Comisión Experta: una distribución donde la mayor parte de los comisionados de derecha se situaba cercana al 1,0 (valor máximo de la derecha) y la mayoría de los comisionados de izquierda se ubicaba prácticamente sobre el -1,0 (valor máximo de la izquierda).

Como es sabido, la Comisión Experta ofreció al Consejo Constitucional un anteproyecto que incorporaba visiones de izquierda y derecha (progresistas y conservadoras; liberales y colectivistas) en un acto de balance que parecía dejar conforme a ambos sectores. Esto lo hizo careciendo de ‘centro político’ (Mascareño, Henríquez y Rozas 2023). Lo que ello mostró es que tal ‘centro’ no es necesario para llegar a acuerdos. Esto permite presuponer dos cosas: a) que muchos de los acuerdos a los que se llegó se producían en deliberaciones y negociaciones políticas que lograban transformar posiciones particulares en normas universales; y b) que existen configuraciones específicas de red que permiten un mayor acercamiento entre posiciones doctrinarias o políticas y donde persuasiones previas se manifiestan de modo más fluido. Las conversaciones, deliberaciones y negociaciones en torno a las normas propuestas conforman el corazón de la actividad política y no son accesibles a la medición, pero su existencia e influencia se puede medir a través de la sensibilidad que los grupos políticos exhiben en votaciones a las posiciones de los adversarios. En la literatura esto puede ser denominado el reconocimiento de las pretensiones de validez de los participantes en la discusión (Habermas 2010). El análisis de modularidad hace posible un acceso a ello.

Esto es justamente lo que hacemos en esta Nota de Investigación en relación con las votaciones de enmiendas del Consejo Constitucional. El Consejo es también un foro ‘sin centro’ (ver Figura 1). Pero esto no determina que deba actuar polarizadamente. No hay relación causal entre ausencia de centro y polarización. Por ello, la intención es identificar los espacios que promueven su práctica deliberativa. Sostenemos que acuerdos y desacuerdos producidos en deliberaciones que anteceden o son paralelas al Consejo (entre consejeros, expertos, asesores, partidos e incluso la discusión pública) se expresan en distintas estructuras de red que son las revisadas en esta Nota. Ello permite entender por qué puede haber ‘acuerdos sin centro’, y ofrece también a los involucrados pistas para identificar qué resultados se asocian a qué prácticas políticas deliberativas que ellos mismos movilizan y cuáles producen clausura de posiciones.

 

2. Modularidad, comunidades y configuraciones de votación

El ejercicio fundamental realizado en esta Nota es el cálculo de modularidad de red. Las redes sociales ciertamente pueden tener una tendencia hacia la homogeneidad. Especialmente cuando se trata de redes de tipo político ellas se diferencian doctrinariamente y pueden incubar polarización (Bail et al. 2018; Guilbeaut et al. 2018; Törnberg 2022). Sin embargo, la diversificación de las redes reduce esa probabilidad (Stein et al. 2023). Para observar las condiciones en las que las redes generan divisiones internas es posible aplicar medidas de modularidad y formación de comunidades al interior de ellas. La modularidad permite determinar el nivel de fragmentación de la red por medio de la identificación de valores propios o atractores que generan una divergencia o bifurcación (alta, media o débil) en la estructura de la red (Newman 2006; Porter et al. 2007; Haq et al. 2019; Zhang and Lu 2023).

La modularidad no es estrictamente una medida de polarización de la red en el sentido clásico de dos grupos opuestos con posiciones antagónicas. Puesto que se trata de topología de redes, la modularidad indica la formación de comunidades dentro de la red general. Ellas se caracterizan por una posición en algún grado distinta de otras comunidades o módulos. La medida de modularidad indica, por tanto, cuánta división se presenta en la red en un momento específico o en relación con temas particulares. Su escala va de 0 a 1; mientras más alto es el valor, mayor es la modularidad de la red.

En el caso del Consejo Constitucional es evidente que hay dos comunidades o módulos de base: izquierda y derecha. Ellos se pueden apreciar, sin análisis de redes, en los valores nominate de la Figura 1 (Lang, Rozas y Mascareño 2023).

Figura 1. Posicionamiento político nominate en el Consejo Constitucional

Este posicionamiento simple, que puede dar la idea de un foro con alta polarización, es el que exige una mayor exploración. Realizamos tal exploración identificando las topologías de red y medidas de polaridad en tres ámbitos:

  • Configuraciones generales de votación en el Consejo Constitucional;
  • Votaciones en el Consejo Constitucional por días;
  • Votaciones en el Consejo Constitucional por capítulos.

La Tabla 1 aporta una descripción de las estructuras generales de votación en el Consejo Constitucional incluido su número (n), porcentaje (%) y modularidad (m). La Tabla 2 entrega el número y modularidad de votaciones por días y la Tabla 3 lo hace por capítulos de la propuesta constitucional.

Tabla 1. Configuraciones de votación en el pleno del Consejo Constitucional

Tabla 2. Votaciones y modularidad por días

Tabla 3. Votaciones y modularidad por capítulos

A partir de estos resultados es posible aproximarse a las configuraciones específicas de red que permiten un mayor acercamiento entre posiciones doctrinarias o políticas en la práctica del Consejo Constitucional y que las instancias restantes del proceso pueden emplear para acercar posiciones y obtener resultados de mayor transversalidad.

 

3. Modularidad de las configuraciones topológicas

Una premisa fundamental del análisis es que, por su configuración política, el Consejo Constitucional tiene dos comunidades de base: izquierda y derecha. Por ello es de interés observar cuándo ellas se modularizan. En estos casos, la homogeneidad de izquierda y derecha se altera. La Figura 2 presenta las cinco configuraciones topológicas de los tipos de votación presentados en la Tabla 1.

Figura 2. Topologías de red según configuraciones de votación

Las votaciones unánimes (Figura 2a), con un 42,6% del total de votaciones, tienen modularidad 0. Esto es aproblemático pues en ellas, todos los miembros del foro votan igual (o dentro de los parámetros considerados en la columna ‘Configuraciones’ de la Tabla 1). No obstante, la modularidad 0 hace evidente un aspecto fundamental: que hubo deliberación previa al momento de la votación o al menos un acuerdo tácito (no controversial) con la norma en cuestión. Asumir que hubo una votación unánime espontánea con un 42,6% de las votaciones no parece realista.

La configuración derecha unida representa un 25,3% de las votaciones con una modularidad de 0,25. En estas votaciones, el Partido Republicano y Chile Vamos votan la aprobación de normas en conjunto y la izquierda rechaza. La modularidad de 0,25 indica que, a pesar de tratarse de una configuración que a simple vista se aprecia polarizada (Figura 2b), al interior de los polos efectivamente se forman comunidades en una proporción no menor –probablemente con un efecto mayor en la izquierda que en la derecha, pero sucede en ambas. Ello advierte que aun en esta configuración extrema, la red contiene comunidades que presentan variaciones respecto del comportamiento general. Dicho de otro modo, existe ahí algún nivel de disidencia que la formación política de acuerdos puede explorar.

Este comportamiento se incrementa en la configuración derecha dividida (Figura 2c). Son considerablemente menos votaciones (22) que representan solo un 2,3% del total. En tal sentido no son significativas. Pero la relevancia de ellas no está en su porcentaje o número, sino en que presentan la modularidad más alta de todas las configuraciones de red, con un puntaje de 0,40. Ello indica que cuando la derecha se divide –en el rango de configuraciones indicado en la Tabla 1– la red general incrementa sus módulos y se vuelve más abierta a comportamientos más improbables, como por ejemplo que miembros de la derecha voten en conjunto con la izquierda. En este caso, como lo muestra visualmente la Figura 2c, se forman tres comunidades: los miembros del Partido Republicano forman una, Chile Vamos otra, y la izquierda una tercera. Lo particular de este caso es que Chile Vamos queda más cerca de la izquierda que de los republicanos.

La configuración izquierda unida (Figura 2d) muestra una situación especial. Esta configuración consiste en normas de interés para la izquierda que son rechazadas en su totalidad. Representa un 6,1% de todas las votaciones con un 0,37 de modularidad. En su forma visual aparece tan ‘polarizada’ como la configuración derecha unida, pero su modularidad es similar a la de derecha dividida. Muestra la segunda modularidad más alta de todas las configuraciones. Esto significa que en ella existen también comunidades con algún nivel de disidencia con sus propios grupos de base. Esto se observa especialmente en la extensión topológica (amplitud) del grupo de derecha. Al compararla con la extensión del mismo grupo en la red derecha unida, se observa en aquella que la comunidad de derecha es más compacta, lo que indica una más alta unidad en el comportamiento en votaciones. La mayor extensión topológica de la derecha en la Figura 2d implica que, a pesar de rechazar la totalidad de las propuestas de la izquierda, hay en ella algún nivel de apertura a tales propuestas, algún nivel de reconocimiento de pretensiones de validez que se manifiesta en votos a favor, abstenciones o ausencias. Por su parte, la izquierda también expresa modularidad especialmente en la figura de un nodo cuyas votaciones (conexiones) son en parte similares a las de nodos de derecha.

La última configuración, izquierda dividida (Figura 2e), representa un 6,8% de las votaciones totales con un 0,11 de modularidad. En este caso, se advierten dos comunidades, la de derecha y la de izquierda. Sin embargo, la comunidad de derecha aparece mucho más densa en su estructura de red, más cohesionada que la izquierda. Esta se muestra altamente disgregada, dispersa, y con un comportamiento en votaciones muy cercano a la derecha, especialmente en dos o tres nodos. Hipotéticamente se puede conjeturar que, en este caso, la izquierda carga con el mayor peso de la modularidad total de la red por girar a la derecha.

Una visión comparativa general de estas configuraciones se puede apreciar en la Figura 3.

Figura 3. Distribución de modularidad por configuración de votaciones

De interés en esta comparación general es la exploración de la relación entre negociación previa entre las partes y el acto de votación. La regularidad parece ser la siguiente: cuando hay deliberación previa en términos de negociación política para el logro de acuerdos, la modularidad puede llegar a 0 (votaciones unánimes). Cuando esa deliberación no se produce o falla, la modularidad se incrementa (otras configuraciones) y se expresa en términos de multiplicación de comunidades.

Puesto que modularidad no es polarización, sino la introducción de algún tipo de clivaje en un entorno de red que sería más compacto sin tal clivaje, es posible argumentar que con la configuración izquierda dividida la derecha absorbe a la izquierda. Por ello su modularidad es baja y atribuible fundamentalmente a una izquierda que se dispersa en su propia red (cada uno de sus nodos se encuentra más separado de otros). En tal caso, el resultado constitucional sería más cercano a posiciones de derecha antes que transversal. Al contrario, la modularidad se incrementa en las otras tres configuraciones. No hay acuerdo previo, pero puede haber deliberación que no resulte en acuerdo, y sin duda hay discusión, al menos la formal antes de cada votación.

Las modularidades crecientes en estas tres configuraciones (derecha unida, izquierda unida, derecha dividida) muestran los efectos de esa deliberación previa sobre el acto del voto: ella evita que cada miembro del foro vote exclusivamente alineado con su propia comunidad original. Por ello no es extraño que la configuración de más alta modularidad sea aquella cuando la derecha se divide, pues tal situación es la que más conflicto político generó en el grupo mayoritario. Esto no solo se expresó en la icónica votación relativa a que “todo ser humano es persona”, sino también en votos en contra y abstenciones en relación con otras propuestas del propio sector.

También la significativa modularidad de la configuración izquierda unida (0,37), donde la izquierda aprueba y el pleno rechaza, indica que las propuestas no dejan indiferente a la derecha. Hay un amplio rango de posibilidades de votación para la derecha entre rechazo y abstención que ella emplea extensamente. Es decir, la votación en contra de la derecha no es monolítica ni absoluta. El resultado de la votación es ciertamente el rechazo de las propuestas de izquierda, pero la modularidad –con mayor carga en la derecha que en la izquierda, a juzgar por la Figura 2d– sugiere que una deliberación previa introdujo perspectivas y actitudes diversas en las votaciones de la derecha en la que hubo algún nivel de reconocimiento que no se transformó en aprobación, aunque sí en alguna duda o apertura a las pretensiones de validez de otros.

Finalmente, la configuración derecha unida se encuentra en una posición intermedia entre la izquierda dividida y la izquierda unida en términos de modularidad. Combina, por tanto, rasgos de ambas, es decir, una absorción de la izquierda por la derecha junto a ciertos niveles de reconocimiento de propuestas de izquierda que no logran aprobarse.

Lo que se obtiene de todo esto es que, sin considerar las votaciones unánimes, donde la deliberación previa resulta en acuerdo generalizado, en cada una de las configuraciones restantes existen indicadores de un potencial reconocimiento de las pretensiones de validez de la posición del otro. Esto es lo que anuncia su modularidad: la formación de comunidades al interior de la red general previene una conducta de votación monolítica o absoluta. Aquella disposición al reconocimiento no alcanza en muchos casos para concretizar la transversalidad, pero está presente y es un potencial de deliberación productiva que puede ser empleado en las fases que quedan del proceso.

 

4. Modularidad por días y capítulos

La modularidad no solo puede ser extraída en las configuraciones de red presentadas en la sección anterior, sino también por días de votación y la discusión de capítulos. En este caso, no presentamos las redes de votación, sino únicamente sus puntajes de modularidad. Esto es lo que muestra la Figura 4 y la 5.

Figura 4. Distribución de modularidad por días de votación

Figura 5. Distribución de modularidad por votación de capítulos

La Figura 4 presenta los puntajes de modularidad por días de votación. Los puntajes son, en general, bajos. Llegan a un máximo de 0,1268 el 20 de septiembre 2023. Puesto que en un día se votan en promedio alrededor de 70 normas, varias de ellas aproblemáticas o previamente acordadas, el puntaje de modularidad no es alto. Pero ello sugiere un punto de alta relevancia: que hay normas particulares que suscitan una modularización de las redes.

Al observar ilustrativamente por día, el 15 de septiembre se discutió, por ejemplo, la norma “todo ser humano es persona” y la referente a la cueca y el rodeo (m=0,0727). El 20 de septiembre se discutió sobre la expulsión de extranjeros, la reclusión domiciliaria en caso de enfermedad terminal y la objeción de conciencia institucional (m=0,1268). Y el 21 de septiembre fue el turno del derecho a la sindicalización y la exención de contribuciones (m=0,0803). Luego de ello, la modularidad de las redes por día es prácticamente 0, hasta el día 4 de octubre, donde aumenta a 0,0772. En este día se discutió, por ejemplo, la justicia ambiental, la participación ciudadana en materias ambientales y la administración ecológicamente responsable del Estado.

El patrón permite sugerir, entonces, que la modularidad de las redes por día aumenta con la votación de disposiciones controversiales. El indicador no es elevado porque en el día se votan una cantidad alta de normas sobre las cuales no hay mayor controversia, lo que reduce el promedio general de modularidad.

En relación con la Figura 5, se aprecia una situación similar. El capítulo más controversial –el que genera más modularidad de red– es el referido a Medioambiente, seguido del de Justicia Electoral, luego el de Poder Judicial, el de Fundamentos del Orden Constitucional, el Derechos y Libertades y, finalmente, el de Representación Política y Participación. Otros presentan una modularidad 0.

Al igual que en el caso anterior, esto sugiere que hay normas o temas específicos que previenen que cada miembro del foro vote exclusivamente alineado con su propia comunidad original y que, por tanto, abren la red a votaciones distintas. Es también en ellas donde se puede advertir el potencial de reconocimiento de las pretensiones de validez de otros.

 

5. Conclusiones

La modularidad de red es un procedimiento algorítmico que permite identificar la formación de comunidades caracterizadas por algún grado de diferencia (divergencia, discrepancia, distancia) con otras comunidades o módulos al interior de la red general. Este procedimiento lo hemos aplicado a las votaciones del Consejo Constitucional entre el 15 de septiembre y el 4 de octubre de 2023.

Los resultados del ejercicio muestran que, a pesar de la existencia de dos grandes comunidades políticas distintas, una mayoritaria (derecha) y otra minoritaria (izquierda), en distintos casos emerge algún nivel de reconocimiento de las pretensiones de validez de la posición contraria. Este parece asociado a la deliberación política general de las normas a distintos niveles (consejeros, expertos, asesores, partidos y discusión pública). De este modo, a mayor deliberación previa de las normas se incrementan los potenciales de reconocimiento de la posición contraria y de acuerdo.

En algunas topologías de red –sea utilizando su configuración arquitectónica, días de votación o capítulos– ese reconocimiento es mayor y en otros es menor. Descontando las votaciones unánimes donde efectivamente hay deliberación que conduce a acuerdos, son pocas las situaciones en las que el análisis de modularidad muestre casos los que cada miembro de la red vote perfectamente alineado con su comunidad original y de manera contraria a la comunidad adversaria. Ello advierte la importancia de la deliberación política y sugiere la existencia de potenciales de acuerdo aún no agotados en la práctica política del Consejo Constitucional y de su entorno amplio.

Adicionalmente, los datos también sugieren que la controversia y la modularización se origina en votaciones específicas. La situación no es generalizada, pero esas votaciones específicas tienen un peso político alto en la evaluación global del proceso, lo que se muestra en la modularidad por días y capítulos. Por ello pueden inclinar la balanza en dirección de una distancia afectiva hacia la propuesta constitucional, especialmente en sectores de izquierda y centroderecha. De ahí que sea relevante concentrarse inicialmente en la resolución de esas controversias, pues en ellas está la clave del incremento de transversalidad de la propuesta. El procedimiento de revisión política tiene que ser bottom up más que top down. La transversalidad de la propuesta es un resultado emergente del cambio en normas particulares y no una transformación generalizada del espíritu que no tendrían por dónde ni cómo empezar.

El proceso constitucional pasa ahora a su fase final con la revisión de la Comisión Experta y luego regresa al pleno del Consejo Constitucional donde las controversias se dirimirán en comisiones mixtas. Para todas estas instancias restantes, al menos cuatro cosas deben ser claras: a) que el ejercicio de deliberación política, tanto en el entorno del Consejo y la Comisión como en los partidos políticos y la opinión pública, es clave para aumentar las probabilidades de éxito; b) que el potencial de acuerdo no está completamente agotado, como lo muestra el análisis de modularidad; c) que la resolución de la controversia en torno a normas específicas puede inclinar positivamente o negativamente la balanza política y afectiva hacia la propuesta constitucional; y d) que el procedimiento de trabajo más efectivo para incrementar la transversalidad es de tipo bottom up y no top down.

 

Referencias

Bail, C.A., Argyle, L.P., Brown, T.W., Bumpus, J.P., Chen, H., Hunzaker, M.F., y Volfovsky, A. 2018. Exposure to Opposing Views on Social Media Can Increase Political Polarization. Proceedings of the National Academy of Sciences 115(37), 9216-9221.

Guilbeault, D., Becker, J. y Centola, D. 2018. Social Learning and Partisan Bias in the Interpretation of Climate Trends. Proceedings of the National Academy of Sciences 115(39), 9714-9719.

Habermas, J. 2010. Teoría de la acción comunicativa. Madrid: Trotta.

Haq, N.F., Moradi, M. y Wang, Z.J. 2019. Community Structure Detection from Networks with Weighted Modularity. Pattern Recognition Letters 122, 14-22.

Lang, B., Rozas, J y Mascareño, A. 2023. Las formas de la votación en el Consejo Constitucional. Visualización Interactiva C22, Centro de Estudios Públicos. Disponible en: https://c22cepchile.cl/analisis/las-formas-de-la-votacion-en-el-consejo-constitucional/ [6 de octubre 2023].

Mascareño, A. Henríquez, P. y Rozas, J. 2023. El valor de la simpatía política mutua. Pragmatismo y convicción en la Comisión Experta. Puntos de Referencia 665, Centro de Estudios Públicos. Disponible en: https://www.cepchile.cl/investigacion/el-valor-de-la-simpatia-politica-mutua-pragmatismo-y-conviccion-en-la-comision-experta/  [6 de octubre 2023].

Mascareño, A., Rozas, J. y Lang, B. 2023. La topología del Consejo Constitucional en plenario. Boletín 65, Centro de Estudios Públicos. Disponible en: https://www.plataformaconstitucionalcep.cl/boletin/boletin-monitor-constitucional-numero-65-26-septiembre-2023/  [6 de octubre 2023].

Newman, M.E. 2006. Modularity and Community Structure in Networks. Proceedings of the National Academy of Sciences 103(23), 8577-8582.

Porter, M.A., Mucha, P.J., Newman, M.E. y Friend, A.J. 2007. Community Structure in the United States House of Representatives. Physica A: Statistical Mechanics and its Applications 386(1), 414-438.

Stein, J., Keuschnigg, M. y van de Rijt, A. 2023. Network Segregation and the Propagation of Misinformation. Scientific Reports 13(1), 917.

Törnberg, P. 2022. How Digital Media Drive Affective Polarization Through Partisan Sorting. Proceedings of the National Academy of Sciences 119(42), e2207159119.

Zhang, T. y Lu, P. 2023. Detecting Communities in Complex Networks Using Triangles and Modularity Density. Physica A: Statistical Mechanics and its Applications 613, 128504.

 

Fotografía por Jatin Gajjar
Autores
  • Aldo Mascareño

    Investigador C22

  • Juan Rozas

    Investigador Asistente C22

  • Benjamín Lang

    Investigador Asistente C22

  • Pablo A. Henríquez

    Investigador C22